Una huella

Este es el discurso que hice para Lenguaje, para efectos del Blog le quité ciertos elementos discursivos:

Trascendencia, "aquello que está más allá de los límites naturales y desligado de ellos", así lo define la Real Academia Española de la Lengua. Sin embargo, ¿cómo puede algo estar más allá de lo natural sin haber pertenecido a ello antes? Esta es la interrogante que me ha surgido y que quiero transmitirles, enmarcándolo en la trascendencia del hombre.

Un dibujo pintado con los dedos en una prehistórica caverna o un complicado plano de una máquina para volar ideada por Da Vinci. Ya sean estos o muchos los casos diferentes, cada uno de los que ha realizado algo que consideramos grandes inventos para su época, han marcado indeleblemente la Historia de la hombre. Sin querer haberlo hecho, o tal vez sí, gran parte de aquellos que fueron avezados en desarrollar sus ideas y no temieron en mostrárselas al público, trascendieron en la humanidad, es decir, dejaron huella.

Somos herederos de una sociedad rica en tecnologías que están a nuestro servicio y que sin ellas sería un poco más complicado vivir. Es esto mismo, el hecho de tener gran parte de lo que queremos y necesitamos al alcance de nuestras manos, lo que ha ido corroyendo y mermando nuestro despertar intelectual; el hecho de que otros ya lo hayan pensado antes y lo hicieran para nuestro servicio, es lo que nos ha estancado en una sociedad idiotizada por el último cachivache tecnológico que nos permita sentirnos mejor que aquel que no lo tiene. Si bien estos servicios han mejorado nuestra calidad de vida enormemente, el daño que producen socialmente a corto o largo plazo, según sea el caso, es realmente nefasto.

Tenemos tecnologías que nos entregan un buen vivir, tenemos familia, amigos, quizá pareja, quienes, sin duda alguna, nos entregan un bienestar emocional grato e irreemplazable, pero, a pesar de todo esto, hay algo que socialmente nos está afectando cada día más y es la falta de razonamiento servible, la ausencia de necesidades comunes y la incapacidad de integrarnos con el resto de nuestra variada sociedad. Esto es, nada más y nada menos, la ausencia de vitalidad social, como la llamo yo, que es la falta de motivaciones reales que nos lleven a hacer algo útil tanto para nosotros mismos como para el resto de las personas, algo que se pueda proyectar en el tiempo, algo por lo que dejemos nuestra huella.

Los recuerdos sociales que tenemos son sólo de los últimos adelantos tecnológicos o de catástrofes naturales o culturales. No está en nuestro subconsciente el espíritu de alguien innovador. No tenemos conocimiento de alguien que haya sido capaz de realizar algo que marque a la Humanidad. Puede que esto se deba a la herencia antes mencionada, a aquello que recibimos preparado y que detiene nuestro crecimiento intelectual, como también puede estar causado por la indiferencia y egoísmo que se han apoderado de la sociedad actual, que no le permite a cada persona ver más allá de sus propios intereses y, probablemente, de los intereses de sus cercanos. Basta con encender el televisor para ver la avalancha tecnológica y delictiva para darnos cuenta que unos poco con una mente un poco más brillante o simplemente más 'avivados' (respectivamente) se ganan la vida a costa nuestra.

Nos hemos estado sumiendo en un mundo que nos retrae intelectualmente, una sociedad poco pensante que se deja llevar por la masa. Nos reflejamos en ideales ajenos a nuestra realidad, luchamos por causas heredadas que ya no son del todo válidas. Aún conscientes de esto no hemos sido capaces de renovar esos ideales ni tampoco de pensar en nuevos esquemas que sean viables para la sociedad en la que nos encontramos. Así como tampoco hemos sido capaces de realizar acciones que beneficien a nuestro entorno o a nuestra vida: no hemos sido capaces de dejar nuestra huella.

Sintetizando lo anterior. La trascendencia es aquello que está más allá de lo natural y que, sin embargo, surge de ello. A lo largo de la historia hubo hombres que sin quererlo trascendieron en la Humanidad, dejaron su huella. Gracias a todos esos hombres es que hemos recibido una herencia social y tecnológica que nos ofrece gran parte de lo que necesitamos, y por ello la sociedad en la que estamos no ha necesitado desarrollar su intelecto para ser capaz de trascender con algo realmente importante, para ser capaz de dejar huella. En la actualidad estamos idiotizados por el egoísmo y por unos pocos seres levemente más pensantes que se nutren económicamente de nuestra ausencia intelectiva, la que nos ha mantenido retenidos en antiguos preceptos que han perdido su validez y no ha habido alguien que los renueve o que proponga nuevos ideales, que deje su huella.

Simplemente quiero hacer el llamado a que analicen sus vidas, a que se den cuenta de qué es lo que quieren para ustedes, para la sociedad en la que están y para su descendencia. Dense cuenta de la necesidad que tenemos de renacer como sociedad, de plantear nuevas concepciones vitales, de generar ideas que los hagan trascender: dejen su huella en la Tierra.

Amistad: Encuentro De Egos

Todos y cada uno de nosotros tiene la tendencia a crear enlaces emocionales y físicos (presencia) con otras personas. Todos nosotros alguna vez sentimos la necesidad de compartir nuestros sentimientos y sucesos con alguien más. En algún momento sentimos que hace falta otra persona para que nuestra vida tenga algún sentido. Así es como nos acercamos a otro ser con el que nos sentimos a gusto y se crean fuertes lazos de confianza y amor, los que cada vez se van fortaleciendo con distintos actos conjuntos. Y de la misma forma como se hacen más fuertes estos lazos, es como también pueden llegar a destruirse fácilmente. Este es el punto...

El formar estos lazos quiere decir, además, que la mantención de estos tiene que ser constante, y para ello tienen que suceder cosas que sean importantes para ambas personas que lo comparten, esto quiere decir que cada cosa que hagamos tiene que influirnos e importarnos tanto como a la otra persona, ya que ésta comparte, en gran medida, la forma de ser de uno. Entonces, cada unión con la otra persona está delimitada por una constante que se llama "egoísmo", que ha de entenderse como la excesiva preocupación por uno mismo desentendiéndose de los demás, y aquí ese desentendimiento por el resto será tanto consciente como inconsciente.

Desde esta perspectiva, es como cada uno de nuestros actos y pensamiento surgen de un deseo intrínseco de autosatisfacción que nos acompaña siempre y es irrevocablemente propio de cada individuo. Por lo tanto, en cada cosa que hacemos estamos satisfaciendo un deseo de hacer esa cosa, y hacer esa cosa, aunque sea en beneficio de otra persona, ayudándola de cualquier forma o escuchándola, siempre cumplirá con la función de satisfacer el deseo de haber ayudado a esa persona. Así es como actúa el egoísmo inconsciente y, a veces, esto es consciente también.

Aquí es donde caemos en el enfrentamiento o encuentro de egos que surge con la amistad, donde compartimos parte del ego del otro (y viceversa) y nuestro inconsciente desea que lo que haga esa otra persona sea provechoso para sí mismo, dejando de lado el resto aunque conscientemente no pensemos de ese modo. Siendo así, la amistad se entendería como la forma en que ocupamos a otra persona a modo de satisfacción del deseo inconsciente que tenemos de mantener satisfecho nuestro ego.

Ahora bien, también existe ese egoísmo consciente y que es el más dañino para el ego inconsciente, ya que el primero es el que lleva a que la persona se dé cuenta de que lo que tiene que hacer ella y los demás, en su totalidad, ha de ser para el beneficio propio, lo que, al truncar el deseo inconsciente de autosatisfacción de otro, aleja a ese otro de la primera persona, anulando ese lazo que lo unía como amigo y también insatisfaciendo ese deseo inconsciente del egoísta consciente, lo que provoca un quiebre que puede ser clave en esa amistad, lo que dejaría descontento al ego inconsciente al no haberse sentido satisfecho e hiriendo, consecutivamente, la autoestima.

En resumen, la amistad sería un acto de egoísmo inconsciente, que se funda en la necesidad básica del humano de autosatisfacerse y que siempre existirá en el ego de cada uno, y que se expresará en el deseo de hacer todo lo que uno hace por satisfacer el querer hacerlo. Por esto es que el lazo de unión entre dos personas se limita al egoísmo inconsciente, que nos hace no-ver a la otra persona como un medio para autosatisfacernos. Junto con esto está el egoísmo consciente, que es una forma en la que hacemos daño a nuestro egoísmo inconsciente al afectar el egoísmo de los otros y alejarlo de nosotros y así negando la autosatisfacción del ego. Por lo tanto, la amistad no es más que una proyección del egoísmo humano y si no cumple esa función, no es amistad.

Definiciones Para La Vida

Analizando el estado "crítico" de la sociedad o de parte de la sociedad, en especial a un gran grupo llamado juventud, me detuve a pensar durante varios días sobre las cosas que son importantes transversalmente en la vida, cosas que no son reales o materiales, sino que, al contrario, son cosas que están presentes a diario in boga de todos.

A mi parecer, las cosas que realmente son necesarias, al ser intangibles, no son consideradas como aspectos importantes o relevantes en la vida, pero si todo se analiza desde un punto de vista más espiritual, nos damos cuenta que las cosas materiales, así como nosotros, tienen un final y eso es lo que no notamos, no nos damos cuenta que la realidad de las cosas es terminarse, no así con lo intangible, lo invisible, que trasciende las barreras materiales y se transforma irrealmente en material.

Sin esto nuestro paso por la Tierra no tiene un sentido real:

- Fe: Es aquello que nos permite atravesar las barreras entre lo intangible y lo material, haciendo de lo primero una realidad material para quien realmente lo siente. La fe es lo que nos permite llevar a cabo lo que esperamos realmente de nosotros.

- Perseverancia: Forma de actuar de las personas que, movida por la fe, nos sirve para llevar a cabo nuestras metas.

- Dios: Ser intangible presente en el Universo que posee vida gracias a la fe de las personas y que es promovido por distintas Religiones, quiénes lo asumen de un modo específico según a alguien le pareció más adecuado. Dios es aquello que dio a luz a todo lo que existió, existe y existirá en la eternidad de la vida. Algunos sostienen que Dios es amor.

- Vida: Cada ser existente en el planeta y/o el universo es vida. Es aquello que se nos fue dado como acto de amor entre dos personas, que se desarrolla a lo largo de la existencia material de un cuerpo. Es todo aquello que nos permite realizarnos frente a la adversidad. Forma de desarrollo impulsaba por la energía de Dios que tiene un final. Es el paso de lo espiritual a lo material en el universo.

- Muerte: Es el fin del paso por el planeta. Es la transición de lo terrenal a lo desconocido. Es el desprendimiento real de lo material a lo intangible, el paso a lo verdaderamente importante. Según las religiones es el estado que permite llegar a la felicidad al encontrarse con Dios. Es el estado de mayor descontrol entre el alma y el cuerpo, debido a que no la conciencia desconoce qué es lo que sucede al morir el cuerpo.

- Frustración: Es aquello que no hicimos de forma correcta y que por un motivo intrínseco en el humano no nos deja desarrollarnos plenamente en un largo periodo de tiempo.

- Familia: Personas cercanas por vínculos sanguíneos que son impuestas por la vida a cada persona, pero que según el desarrollo que se produce en cada individuo puede ser una interrelación afectuosa o netamente nefasta. La familia se une, de manera superficial, por el amor.

- Amistad: Vínculo creado con otras personas que permite el desarrollo social y personal en la vida. Estas otras personas pueden ser de cualquier tipo, ya que es elección de cada individuo elegir con quién quiere entablar una amistad. Está basada en la confianza mutua de dos o más personas y también las une superficialmente el amor.

- Amor: Sentimiento entre dos o más personas que les permite transgredir todo tipo de barreras (psicológicas y físicas). Permite a dos personas estar juntas toda la vida, a través de cualquier tipo de relación (amistosa o de pareja). Es aquello que nos permite tener la sensación de felicidad cuando el sentimiento es mutuo, en cambio, si el amor no es correspondido, puede hacer mucho daño espiritualmente a una persona. El amor es una "luz" que nace en cada persona y que es inducido por una fuerza superior a todo (Dios).

- Confianza: Situación de seguridad recíproca entre dos o más personas que les permite contar 100% con otra. Generalmente se produce en conjunto con el amor, pero la confianza es un hilo muy delgado que puede cortarse muy fácilmente, por lo que tener la confianza de otro es una gran responsabilidad.

- Responsabilidad: Es aquello a lo que estamos obligados a responder de manera honesta, ya que es la responsabilidad lo que mejora el desarrollo en la vida.

- Ética y Moral: Dos conceptos subjetivos que deben ser complementados con la subjetividad social, es decir, que son modelos personales que deben compatibilizar con un macro-modelo social.

- Alma: Es la esencia de cada ser vivo en el universo. En los humanos se le conoce también como conciencia. Es inmortal y, en conjunto con lo material, es lo que permite sentir cada una de las cosas que sucede en forma externa e interna al cuerpo. Sin alma la vida no es posible. El alma es aquello que trasciende lo material y que se conserva eternamente al morir el cuerpo.

- Conciencia: Es lo que permite al ser humano saber que vive, qué es lo que sucede a su al rededor y distinguir el bien del mal, es decir, forma su moral. A los humanos nos distingue de cualquier otra cosas viviente en la Tierra.

- Experiencia: Serie de hechos que suceden a lo largo de la vida que son asumidos por la persona para su bien. También se le conoce como el aprendizaje luego de cometer errores. Pero cualquier situación que es provechosa para cada individuo, es experiencia para el mismo.

Puede que sean muchas más las cosas que sean importantes para el desarrollo personal en la vida, pero estas que puse pienso que son trascendentales para entender por qué estamos aquí y cuál es el propósito de esa energía superior por ponernos el desafío de vivir.

La Anormalidad del Concepto "Normal"

En 2009, en la asignatura de Filosofía, con el profesor vimos por largo tiempo lo referente a lo que es normal o anormal. Finalizando la Unidad, escribimos un texto sobre qué entendíamos sobre aquello, he aquí el trabajo:

Al referirnos a lo "normal", nos concentramos en una definición a la que, lo más probable, ninguno pertenezca, pero a la cual estamos todos integrados gracias a la sociedad a la que pertenecemos. Por el contrario, al hablar de "anormal", la mayoría podría decir que lo anormal es tal o cual cosa, sin embargo, el contexto bajo el cual se esté definiendo es determinante para estos conceptos. Tras de esto es que surge la necesidad de aclarar qué es normal y qué no lo es, a pesar de la dificultad que esto influye y la variabilidad de conceptos que se han entregado y están por entregarse.

Lo que se ha dado a conocer como normal en realidad nunca se ha manifestado realmente, ya que cualquier definición de normal se desvía automáticamente a lo anormal, lo que se da porque resulta más fácil mostrar lo alejado a las normas antes que lo que realmente se adapta a ellas. Por ejemplo, es más fácil decir que una persona discapacitada es anormal antes que decir que alguien con sus 5 sentidos sanos es normal, porque la primera persona tiene menos capacidades que la segunda, por lo que socialmente sería anormal frente a la otra.

Sin embargo, lo que se clasifica como normal no es siempre lo que se cumple, porque la subjetiva definición de ésto nunca será capaz de encasillar efectivamente a más de algún sujeto, pero a su vez, el concepto de anormal tiene mayor efectividad en ese sentido, ya que la pertenencia a la "norma" es más difícil (casi imposible) en relación a la no pertenencia a ésta.

En relación con esto, la definición de lo normal puede encasillarse más en lo anormal, debido a que la clasificación desarrollada por "especialistas" es algo subjetivo, es decir, es propio, por lo que no se acerca a lo que sí es normal, algo que correspondería al pensamiento de todas las personas, un pensamiento casi uniforme, que no cabe en la definición de cada persona. Así, bajo este canon, lo normal definido por un individuo sería anormal bajo la normalidad anormal de otro, que se basa en una normalidad propia que deduce una anormalidad general.

Finalmente, la normalidad está definida bajo el concepto de una persona "normal" que se basa en su propio pensamiento para conceptualizarla y esta normalidad subjetiva es aceptada por una sociedad que pobablemente no quepa bajo el concepto propuesto, por tanto, la normalidad está definida por un individuo que crea su propia normalidad dentro de su anormalidad y lo hace público para un invisible e imperceptible beneficio que no tiene un claro fin.

Nuevo Año, "Nueva Vida"

Comienza otro año y muchos dicen de sus "nuevas vidas". Mmh... nueva vida de un día para otro? qué difícil!, aunque puede que no sea imposible. Pero a qué le llaman nueva vida? Una nueva vida supone nuevas expectativas, mejor comportamiento social, aceptación de uno mismo y cosas así, sin embargo, siguen pensando igual que antes, comportándose igual que antes y relacionándose con los mismos de antes... dónde está el cambio!!!??? D:

Está bien que el cambio es paulatino y, hasta, engorroso, pero la gente debe pensar que un cambio radical es imposible cuando se ha desarrollado un estilo de vida marcado por todas las tendencias socio-culturales impuestas a lo largo de sus vidas y, a su vez, asimiladas por las mismas personas.

Toda la carga social acumulada a lo largo de la historia personal, marca de todas formas a la persona, dependiendo de la forma en que ésta lo asimile. Cada vez que una persona acepta un patrón social, asume, inconscientemente, que eso estará de por vida en ella misma, por lo que su desprendimiento de ello será un proceso tortuoso para su mente. En cambio, al renegar de algún estatuto de la sociedad, éste relegará de su vida y, cada vez que se enfrente a él, será difícil una perspectiva positiva sobre aquella norma social.

Por tanto, cuando una persona quiera cambiar realmente su vida, debe saber que se verá enfrentada a una serie de situaciones que, unidas además con su régimen psico-biológico, serán muy difíciles de afrontar, ya que todo aquello que ha aprendido, aprehendido y otras cosas que ha rechazado de su modo de ver las cosas, estarán con ella hasta que muera, o hasta que pierda completamente la memoria.